En el marco de su primera gira por Latinoamérica, el presidente español visita México donde es recibido por su homólogo, Miguel de la Madrid
México, que acoge a más de 25,000 exiliados republicanos tras la Guerra Civil, nunca reconoce el régimen del general Franco. Las relaciones diplomáticas entre ambos países se restablecen bajo el gobierno de Adolfo Suárez, quien visita oficialmente México en abril de 1977. Años después, en junio de 1983, Felipe González viaja por primera vez a México como presidente del Gobierno, en el marco de su primera gira por Latinoamérica, que también lo lleva a Santo Domingo, Colombia, Venezuela y Panamá.
Miguel de la Madrid, presidente de México entre 1982 y 1988, y la primera dama, Paloma Cordero, reciben al presidente español y a su esposa Carmen Romero. En el primer día de la visita oficial, los anfitriones ofrecen a sus invitados una cena de gala en el palacio de Itatelolco Al día siguiente Felipe González se reúne en la Embajada de España en Ciudad de México con la colectividad española, integrada por un gran número de exiliados republicanos. Ante ellos, expone el proyecto histórico que lidera para construir un futuro de paz, libertad y reconciliación en España.
Con la victoria del PSOE en las elecciones generales de 1982, la nueva política exterior del gobierno de González encuentra en México un aliado clave para su estrategia iberoamericana. La sintonía entre las políticas exteriores de los gobiernos de Miguel de la Madrid y Felipe González es evidente. La cooperación en el Grupo de Contadora, el Grupo de Apoyo y el Grupo de Río resulta fundamental para fortalecer la relación bilateral entre ambos países durante toda la década de 1980.

