Brasil

Respaldo español al proceso de democratización de Brasil

Las fuerzas armadas brasileñas rinden honores al líder español en su primera visita oficial a Brasilia

Al llegar a La Moncloa en 1982, Felipe González emprende una política iberoamericana que apuesta por un apoyo férreo y contundente a los procesos de democratización iniciados en países como Argentina, Brasil o Chile. Con el objetivo de expresar el respaldo del gobierno español al proceso democrático iniciado en 1985 por Brasil, Felipe González visita la capital administrativa -Brasilia- en pleno proceso constituyente. Allí es recibido por el presidente José Sarney.

José Sarney asume la presidencia de la República Federativa de Brasil tras la repentina muerte de Tancredo Neves, candidato del Movimiento Democrático Brasileño, organización política opositora al régimen militar. En las elecciones presidenciales de 1985, la fórmula encabezada por Neves, con Sarney como candidato a la vicepresidencia, se impone con el 72,4% de los votos del colegio electoral. Un día antes de su toma de posesión, Neves es hospitalizado debido a una diverticulitis y fallece. Sarney asume la presidencia de Brasil, ejerciendo el cargo desde abril de 1985 hasta marzo de 1990, periodo en el que enfrenta una grave crisis económica provocada por la hiperinflación.

En junio de 1987, momento en el que se produce la visita oficial del presidente González a Brasil, el gobierno de José Sarney busca por medio del Plan Bresser adoptar medidas que frenen la hiperinflación que sufre la economía brasileña. Felipe González, que busca con esta visita poner fin a un desequilibrio de 76 millones de pesetas en la balanza comercial entre ambos países, se encuentra con una postura negativa del gobierno brasileño acuciado por sus deudas internacionales. Más allá del plano económico, el presidente español interviene ante la Asamblea Constituyente del Congreso Nacional de Brasil para exponer la experiencia de la Transición española hacia la democracia.