El presidente español saluda alegre a ciudadanos cubanos durante su visita oficial a la isla
En noviembre de 1986, el presidente del Gobierno español, Felipe González, realiza una visita oficial a Cuba en respuesta a una invitación de Fidel Castro. Gran parte del viaje transcurre en Cayo Piedra, el islote privado del líder cubano, donde González se aloja junto a los escritores Gabriel García Márquez y Alfredo Bryce Echenique, además del propio Castro. La fotografía captura un momento concreto de un acto oficial en el que ambos mandatarios pasean por La Habana Vieja, saludando a los ciudadanos que se congregan a su paso.
Durante la visita ambos líderes tratan temas delicados para las relaciones bilaterales entre Cuba y España. Uno de los temas clave es la indemnización que reclaman más de 3.000 españoles cuyas propiedades son expropiadas tras la revolución cubana de 1959. Mientras los afectados exigen 350 millones de dólares, las autoridades cubanas ofrecen solo 30 millones, lo que convierte las negociaciones en un punto de tensión. González y Castro también intercambian ideas sobre otros temas, como el proyecto de paz para Centroamérica, una iniciativa que busca reducir los conflictos y estabilizar la región.
Este viaje, tras varios aplazamientos, simboliza un impulso en la política iberoamericana de González. A pesar de las dificultades en las negociaciones y la compleja relación entre ambos países, la visita refuerza sus vínculos bilaterales dentro del contexto internacional.